La Diócesis de Tepic ha retirado oficialmente todas las facultades ministeriales al sacerdote colombiano Carlos Cancelado, luego de que permaneciera «ilocalizable» durante varios años.
En un comunicado difundido este martes, la diócesis confirmó que Cancelado fue suspendido por abandonar su parroquia en la localidad de Mexcaltitán desde el año 2022, y se le ha prohibido predicar, administrar sacramentos o actuar públicamente como sacerdote.
Aunque el comunicado no detalla las razones exactas detrás de esta medida, medios locales han reportado que existen señalamientos por presunto abuso sexual contra un menor, lo cual podría haber influido en la decisión eclesiástica. Por ahora, las autoridades civiles y eclesiásticas continúan analizando el caso.
¿Quién es el Padre Carlos Cancelado?
Carlos Cancelado es un sacerdote católico colombiano que alcanzó notoriedad internacional dentro de círculos conservadores de la Iglesia por sus impactantes testimonios sobre el purgatorio, el infierno y la acción de los demonios en el mundo actual. Fue especialmente conocido por su participación en retiros espirituales, conferencias de liberación y videos virales en plataformas como YouTube.
Con un estilo directo y emotivo, el Padre Cancelado afirmaba haber recibido revelaciones sobrenaturales y visiones del más allá. Uno de sus videos más populares, con más de 470 mil vistas, narra lo que él describe como encuentros con almas del purgatorio y advertencias celestiales sobre la comunión en la mano, a la que consideraba una práctica que podría llevar a la condenación eterna.
Estas afirmaciones —frecuentemente compartidas en medios religiosos como Jesús te busca y La fe católica— le dieron popularidad entre fieles que buscan experiencias espirituales intensas. Al mismo tiempo, sus mensajes provocaron críticas por parte de sectores eclesiales más moderados, quienes cuestionaban tanto el contenido como la veracidad de sus revelaciones.
De la fama a la suspensión
El Padre Cancelado se radicó en México, donde fue asignado a la parroquia de Mexcaltitán, en el estado de Nayarit. Sin embargo, desde 2022 se había ausentado sin autorización, lo que llevó a la Diócesis de Tepic a declarar que se encontraba «ilocalizable». En agosto de 2025, tras varios intentos fallidos de establecer contacto y ante los señalamientos públicos en su contra, la diócesis tomó la decisión de retirarle todas sus funciones ministeriales.
Actualmente, el sacerdote permanece fuera del ejercicio público, y no se ha pronunciado oficialmente sobre las acusaciones ni sobre la decisión de la Iglesia.