El Papa Francisco afirmó que el futbolista Pelé fue más grande que sus compatriotas argentinos Diego armando Maradona y Lionel Messi, reciente ganador de su octavo Balón de oro.
En una entrevista con la RAI, el Sumo Pontífice no solo evitó elegir entre los dos icónicos futbolistas argentinos, sino que también añadió un tercer nombre a la ecuación: Pelé.
Francisco expresó que, en su opinión, Pelé es el “gran señor” entre los tres, dejando atónitos a los fanáticos del fútbol en todo el mundo.
Cuando el periodista italiano le preguntó: “¿Messi o Maradona? ¿A quién prefiere?”, el Papa Francisco respondió de manera inesperada: “Yo agregaría a un tercero: Pelé. Son los tres que yo he seguido”.
El Papa Francisco no se detuvo allí y compartió sus opiniones sobre cada uno de estos jugadores legendarios.
Respecto a Diego Maradona, el Obispo de Roma reconoció su grandeza en el terreno de juego pero también hizo mención a sus luchas personales: “Como jugador fue un grande, pero como hombre falló. El pobre resbaló y su entorno no lo ayudaba”.
Estas palabras reflejan una comprensión compasiva de las dificultades que enfrentó Maradona a lo largo de su vida.
En cuanto a Lionel Messi, el Papa lo describió como un caballero ejemplar: “Es correctísimo. Es un señor”. Esta apreciación de la conducta de Messi fuera del campo resalta la admiración que muchas personas sienten por su carácter y comportamiento humilde.
Sin embargo, el punto culminante de las declaraciones del Papa Francisco fue su afirmación de que, entre estos tres gigantes del fútbol, Pelé es el más grande. El Santo Padre lo describió como “un hombre de gran corazón”, elogiando tanto su habilidad en el campo como su humanidad fuera de él.
El Santo Padre recordó una ocasión en la que tuvo la oportunidad de hablar con Pelé durante un vuelo a Buenos Aires y lo calificó como un individuo de una “humanidad muy grande”.
Pelé, el legendario futbolista brasileño, es conocido por sus numerosos récords y logros en el campo, así como por su carisma y personalidad agradable fuera de él. Estas cualidades, junto con el respaldo del Papa, consolidan aún más su estatus como una de las figuras más emblemáticas de la historia del fútbol.
La opinión del Papa Francisco sobre este asunto demuestra una vez más la importancia del fútbol en la cultura global y cómo este deporte puede trascender fronteras, uniendo a personas de todas las religiones y nacionalidades en su admiración por los talentos futbolísticos excepcionales.