Gerson Gonzales, un joven católico de 29 años con atracción a personas del mismo sexo, compartió un video en el que expresa su desacuerdo con la declaración del Vaticano conocida como Fiducia Supplicans, afirmando que esta deja desamparadas a las personas «homosexuales» e hizo un llamado al Papa Francisco para que anule dicho documento.
El joven peruano, quien hizo un compromiso público de vivir en castidad, lidera el apostolado Éxodo y Victoria, dedicado a acompañar a católicos que comparten una situación similar.
Recientemente, Gonzales compartió un video en el que, tras reconocer la importancia de que esta declaración reafirme la visión tradicional del matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer abierta a la vida, expresa su preocupación acerca de los efectos de la Fiducia Supplicans.
Para Gonzales, la declaración omite abordar de manera efectiva las necesidades y los desafíos reales que enfrentan las personas con atracción hacia el mismo sexo dentro de la Iglesia Católica. Además, señala que bendecir a las parejas del mismo sexo mientras se rechaza la unión que conforman es contradictorio y perjudicial, ya que legitima una relación que, en su opinión, solo profundiza las heridas emocionales y las inseguridades personales.
El lider de Éxodo y Victoria también asegura que la homosexualidad representa una combinación de sensibilidad única y heridas emocionales profundas, ajenas a la responsabilidad individual. Por eso, insiste en que participar en actos homosexuales solo agrava estas heridas y perpetúa un ciclo de inseguridades y carencias afectivas.
El joven peruano aboga por una comprensión más compasiva y completa de la realidad de las personas homosexuales dentro de la Iglesiay subraya la necesidad de una pastoral que promueva la verdadera alegría a través del anuncio del Evangelio completo y el acompañamiento hacia la santidad, que él entiende como vivir la castidad en su condición homosexual con la ayuda de la gracia divina.
Para Gerson Gonzales, la Iglesia debe acoger a las parejas del mismo sexo con amor y comprensión, alentándolas en su camino hacia la conversión y la santificación, aunque este proceso pueda implicar decisiones difíciles, como la separación; sin embargo, sostiene que es fundamental para su crecimiento espiritual y su búsqueda de la verdadera felicidad.
Finalmente, Gerson Gonzales pidió que la Iglesia recuerde a las personas homosexuales que su lugar está en el Reino de los Cielos, y que el objetivo último es orientarse hacia esa meta celestial. En este sentido, instó a los miembros de la Iglesia a brindar apoyo, oración y acompañamiento pastoral a aquellos que comparten su misma experiencia, para que puedan encontrar la plenitud de vida que ofrece el mensaje de Jesucristo.